lunes, 16 de abril de 2012

Vacío migratorio

Después del primer periodo migratorio que protagonizaron las aves limícolas en la segunda quincena de marzo, con la aparición de pequeños grupos de varias especies, la migración parece haberse detenido. Estas dos semanas anteriores hice varias visitas a la playa de Bañugues y sólo en una de ellas detecté un ejemplar de correlimos común Calidris alpina el día 9 de abril. Eso sí, una observación muy interesante porque se trataba de un ave anillada, aunque aún no he conseguido su historial.

Correlimos común Calidris alpina Dunlin


¿Por qué sucede esto? Lo que yo pienso es que la migración de este grupo de aves en primavera es secuencial, y a nosotros llegan primero las aves que más cerca están. Por ello, esa primera oleada migratoria  de marzo y primeros de abril habría estado protagonizada por aves que han pasado el invierno en el suroeste de la Península Ibérica y el norte de África.

En el mapa de invernada de estas aves en el litoral africano se aprecia una gran zona prácticamente vacía entre los humedales del norte de Marruecos y la zona de Mauritania, un gran espacio que coincide casi completamente con la costa del Sahara Occidental. Este es un mapa de las zonas de Importancia para las aves (IBAs) africanas, obtenida de la página de BirdLife International.


Por tanto, este vacío migratorio se corresponde con el hueco de invernada que deja esa zona tan amplia. Pronto comenzarán a llegar los limícolas invernantes en el resto del litoral africano. Por ejemplo, una especie que apenas aparece hasta que llega esta nueva oleada es el correlimos tridáctilo, cuyos efectivos invernantes al norte de Mauritania son muy escasos.

Igual ocurre con otras especies como el zarapito trinador o la aguja colipinta. El gran máximo anual de migración, que ocurre casi todos los años en la primera semana de mayo, a veces un poco antes, coincide con el paso de las aves que han pasado el invierno en el gran edén de las aves limícolas, el Banc d'Arguin, al norte de Mauritania, donde se concentran por cientos de miles en sus grandes bancos de limo. Por ejemplo, allí invernan más de 100.000 ejemplares de correlimos común de la subs. schinzii.



El panorama en cuanto a otras aves estos días también ha sido desolador. Se han ido ya todos los invernantes, la última la garceta común, y se han visto poquísimas gaviotas, entre ellas un ejemplar de primer verano de gavión Larus marinus el día 14.

Gavión Larus marinus Great Black-backed Gull

2 comentarios:

  1. Hoy en Gijón solo había vuelvepiedras, es algo creo que generalizado. Gaviotas, las locales nada más.

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  2. Claro que sí, de momento no nos llega la nueva oleada migratoria, además como ya explicó Jorge las condiciones meteorológicas son muy poco favorables. Pero si no me equivoco, el hecho de que los migrantes estén retenidos puede hacer que este año se den buenos picos, a ver que pasa.

    Un saludo

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